martes, 8 de septiembre de 2015

Valor

Decidí tomarme el verano para mí.
Necesitaba espacio y tiempo para encontrarme a mi misma y saber que es lo que necesitaba y que es lo que quería.
He cambiado; mucho, poco, a ratos, para siempre... La cosa es que yo soy íntegramente yo pero he conocido el valor de la lucha por lo que una misma quiere conseguir.
Con solo 20 años está claro que no tengo apenas idea de lo que va este juego al que llamamos vida. Tú tiras los dados y que la partida continúe; lo que te toque ya depende de ti afrontarlo.

Ayer leí un post que os adjunto un poco más abajo en el que te encontrabas con la misma situación pero lo afrontaban tres elementos diferentes. Hace unos tres años más o menos yo era la zanahoria y acabé acudiendo a un profesional. Al salir recibí otro palo enorme y como si de un huevo se tratase me volví más fría y menos cariñosa. Pero este verano he comprendido que me voy a tener que enfrentar a miles de situaciones que no me van a agradar y que depende de mí transformarlas para sacarle su lado positivo; en otras palabras, volverme como un grano de café.

http://sabiasquep.com/p-ella-le-dijo-a-su-abuela-que-la-acababan-de-enganar-su-abuela-le-dijo-que-tenia-que-hacer-esto-4223

Para ser sincera, nunca pensé que llegarían a darme igual ciertos aspectos a los cuales antes les daba una importancia tremenda. Supongo que será un signo de que estoy creciendo, aún no lo tengo del todo claro.

Lo único que he conseguido sacar en claro es que para ser feliz tengo que empezar a darle menos importancia al pasado y vivir el futuro. Porque el presente es hoy, aquí, ahora... Y como me despiste ya forma parte del pasado. No darle importancia no significa olvidar, ojo que son dos cosas bien distintas. Las personas cambian muy raramente y si de verdad le importas a alguien te lo tiene que demostrar. Todo el mundo tiene derecho a equivocarse y a rectificar, sin embargo una misma hay cosas que no se merece porque tiene sentimientos como cualquier otra persona normal y se merece que la traten como tal. Yo también me equivoco y procuro rectificar en el momento en el que me doy cuenta, aunque a veces hace falta una pequeña ayuda para darse cuenta de esos pequeños errores.

La verdad es que tengo las cosas bastante claras a excepción de unas cuantas de las cuales no me fío aún y no sé que puede pasar. Ya que, sincerándome, no quiero que me vuelvan a hacer daño y que me vuelvan a usar. Personas como esas no merecen la pena por mucho que nos engañemos...

Así que es probable que haya que echarle valor a todo lo que se nos venga por delante y si aún no has leído el post te aconsejo que lo leas y te conviertas en ese famoso grano de café que puede con todo.

Y aquí una cover que me encanta de estos chicos con voces increíbles:


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Zapatos incómodos

Hola, sé que hace mucho que no escribo, pero era necesario un tiempo para poder poner un poco en orden mi vida. Esta entrada es bastante p...